La Audiencia Nacional acusa a Francisco Martínez de "ciberataques reiterados y planificados desde Suiza contra organismos públicos"

La Audiencia Nacional atribuye al ex número dos de Interior durante el Gobierno de Mariano Rajoy, Francisco Martínez, un papel más que relevante al frente de "una organización de un alto nivel de sofisticación tecnológica y operativa" destinada a "almacenar, organizar y cruzar grandes volúmenes de datos obtenidos ilícitamente", según fuentes jurídicas a laSexta.

El expolítico, ahora en prisión provisional sin fianza, empleó "plataformas tecnológicas especializadas en el análisis de la información masivo de información sustraída mediante ciberataques e intrusiones informáticas reiteradas y planificadas contra sistemas de organismos públicos y privados, ejecutadas de manera sostenida durante años".

En este sentido, la investigación ha evidenciado que se combinaban "recursos informáticos avanzados, mecanismos de anonimato y opacidad, y una diversificación funcional de sus integrantes", que operaba "a través de una red compleja que integra estructuras empresariales, conexiones personales e institucionales, y profesionales que garantizan la continuidad y expansión del entramado criminal".

Así, se destaca que "uno de los elementos clave de este entramado" era "su capacidad para almacenar, organizar y cruzar grandes volúmenes de datos obtenidos ilícitamente, empleando plataformas tecnológicas especializadas en el análisis masivo de información".

"A partir de esta acumulación progresiva, la organización construye perfiles detallados de personas e instituciones, con el objetivo de maximizar su capacidad de control, explotación estratégica y comercialización de información sensible", añade, tras lo que subraya que este grupo "ha evolucionado desde un esquema tradicional de ciberdelincuencia hacia una red de inteligencia criminal privada y transnacional, con capacidad de intervención en sectores estratégicos, y con objetivos que trascienden el mero beneficio económico, alcanzando una dimensión de control y explotación masiva de información sensible".

La trama que investiga la magistrada María Tardón atribuye un "rol central" a Martínez, que está bajo el foco de la justicia por delitos de organización criminal, revelación de secretos, allanamiento o intrusismo en sistema informático, apoderamiento y cesión de datos reservados y, por último, blanqueo de capitales. "Es una red de inteligencia criminal privada", expone la jueza.

En las diligencias, que siguen bajo secreto de sumario, se apuntaría a que el hacker José Luis Huertas, más conocido como Alcasec, no solo hackeo a la Comisión Nacional de Mercados y Competencia (CNMC), sino que además robó información del Registro Civil, de la DGT y de Puertos del Estado, dependiente del Ministerio de Transportes.

Además, también han encontrado datos de empresas de diferentes sectores como el logístico y el energético, y registros mercantiles. También de países como Bolivia Andorra y República Dominicana, país clave para las redes de corrupción que lavan dinero obtenido ilegalmente.

Host con sede en Suiza

El hacker, pendiente de sentarse en el banquillo por el ciberataque al Punto Neutro Judicial en 2022, contrató un host a una empresa con sede en Zúrich, que pagó con criptomonedas, para canalizar todos esos millones de datos en un servidor suizo. Le daba anonimato total, y además podía conectarse de manera remota. istraba el servidor desde su casa, desde la sede social de la empresa Horus y desde locales comerciales.

Tal era el nivel que apuntan a una evolución de un sistema tradicional de ciberdelincuencia a toda una red internacional en el que todos tenían un papel determinado, con Alcasec como líder de la red. Todo desembocó en su detención, junto con la de Francisco Martínez, Adrián Molina y otra persona más en Andorra. Para los tres primeros, prisión provisional sin fianza por existir "un riesgo real" de destrucción de pruebas.

Tanto él como los otros dos acusados serán juzgados por delito continuado de revelación de secretos y de ilegal a sistemas informáticos. Alcasec, en octubre de 2022, se sentará en el banquillo por un ciberataque tras acceder al Punto Neutro Judicial del CGPJ al suplantar la identidad de dos funcionarios de Justicia.

Francisco Martínez, un "rol central"

A Francisco Martínez, por su parte, se le atribuye un "rol central" en las estructuras societarias de Alcasec. La jueza considera que intervino en la configuración de dos sociedades para canalizar los ingresos ilícitos del joven. Tardón expone que él, en su condición de abogado, conocería "en detalle" el uso de esas dos mercantiles.

"Francisco Martínez, abogado en ejercicio, desempeñaría un rol central en la consolidación y sostenibilidad de la organización criminal. Su función abarcaría el diseño y la operación del blindaje legal, patrimonial e institucional que permitiría a los técnicos del grupo, en especial a José Luis Huertas, operar con continuidad, anonimato y una legitimidad aparente", señala.

Así, se destaca que el perfil profesional de Martínez "combina conocimientos jurídicos, vínculos institucionales y experiencia política, debido a los cargos de dicha naturaleza desempeñados por él en el pasado", lo que, según apuntan, "lleva a inferir, a tenor del resultado de las investigaciones, que es él quien brindaría su perfil profesional a una estructura ilícita altamente tecnificada, liderando también las acciones de blanqueo de imagen y legitimación pública, en especial respecto de José Luis Heras".

"Las consultas realizadas por Francisco Martínez tienden a satisfacer sus propias necesidades de información, lo que evidencia su utilización consciente de los recursos ilícitos de la organización para fines personales o profesionales", añade.

De esta forma, se concluye que Martínez "se ha evidenciado como miembro activo de la estructura operativa del grupo criminal". "Las búsquedas realizadas por Francisco Martínez mediante su directo al bot automatizado desarrollado por la organización orientadas a satisfacer sus propias necesidades de información, lo sitúan como beneficiario y consciente de los recursos ilícitos del entramado", destaca.

Sostiene, además, que en el análisis preliminar del teléfono se detectaron hasta 21 consultas de su de Telegram en dichas plataformas. Las conversaciones entre ambos habrían revelado un "conocimiento total" de Martínez en lo que Alcasec hacía. Él, en su interrogatorio, expuso que solo quería ayudarle "al ser un niño sin padre" que "se mete en problemas siendo menor".