Victoria patrimonial para Aragón: el Supremo ordena la restitución de las pinturas de Sijena

El Tribunal Supremo confirma que las pinturas murales del Monasterio de Sijena regresarán a su lugar de origen. La sentencia ratifica el fallo previo de la Audiencia de Huesca y reconoce la propiedad aragonesa de estas valiosas piezas, consideradas una de las joyas del románico español.

La resolución de la Sala de lo Civil obliga al Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC) a restituir las pinturas a la sala capitular del monasterio de Villanueva de Sijena (Huesca). Estas obras fueron arrancadas en condiciones precarias al inicio de la Guerra Civil por el funcionario de la Generalitat catalana José Gudiol.

Los magistrados del Supremo rechazan uno a uno los argumentos que cuestionaban la legitimidad del Gobierno de Aragón y del Ayuntamiento de Sijena para personarse en nombre de la comunidad religiosa de las Hermanas Sanjuanistas —propietarias del monasterio— y reclamar la propiedad de las pinturas. El tribunal insiste en que Aragón tiene competencias para defender su patrimonio histórico-artístico y subraya que el objetivo es que el monasterio "recupere sus pinturas murales".

Además, el Supremo rechaza que Cataluña pueda reclamar la propiedad de las pinturas por usucapión —el derecho a adquirir una propiedad por uso continuado en el tiempo—, ya que, según los magistrados, el MNAC "nunca llegó a poseer las pinturas murales como dueños".

La sentencia también invalida el acuerdo suscrito entre la Generalitat y la priora del Monasterio de Valdoreix (Barcelona) —al que se trasladaron en los años noventa las últimas Hermanas Sanjuanistas de Sijena— al no constar que dicha priora tuviera capacidad jurídica para representar a la comunidad de Sijena y disponer de su patrimonio.

Tampoco se han acreditado cesiones válidas de las pinturas en favor de la Generalitat. De hecho, el tribunal recuerda un decreto pontificio que otorgó a la priora del Monasterio de Sijena, Virginia Calatayud, la potestad de emprender acciones para recuperarlas, derecho que ejerció posteriormente a través del Gobierno de Aragón.

Con este fallo, el Supremo desestima los recursos de infracción procesal y de apelación interpuestos contra la sentencia de la Audiencia de Huesca y condena a la Generalitat y al MNAC a devolver las pinturas murales a Sijena y a asumir las costas del proceso.

Las reacciones a la decisión

El presidente aragonés, Jorge Azcón, ha celebrado la sentencia en sus redes sociales, calificándola como un fallo que "zanja categóricamente el litigio a favor de los aragoneses y de la integridad de su patrimonio cultural". No obstante, ha advertido que la satisfacción será completa "cuando se puedan contemplar las pinturas en su emplazamiento original".

Desde el ámbito catalán, las reacciones no se han hecho esperar. El presidente de JxCat y expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha calificado la resolución como "un despropósito" en su cuenta de X. A su juicio, "es una sentencia que no se puede ejecutar sin poner las pinturas en un riesgo muy alto de destrucción. Todos los expertos de todo el mundo lo advierten", ha sostenido.

En la misma línea, el exconseller de Cultura y actual diputado de JxCat en el Parlament, Lluís Puig, ha denunciado el "daño irreversible" que, a su entender, supone esta decisión para el patrimonio cultural catalán.