Beatriz Parera reflexiona sobre el caso de las residencias: "El hecho de que Burgueño sea mando único lo sitúa, sin ninguna duda, en el papel de imputado y no de testigo"

Burgueño ha acudido a declarar en los Juzgados de Leganés en calidad de testigo, en el marco de la segunda causa judicial por los llamados protocolos de la vergüenza aplicados en residencias madrileñas durante la pandemia. Sin embargo, según fuentes de las acusaciones consultadas por laSexta, la Fiscalía ha solicitado suspender su declaración tras escuchar que fue nombrado "mando único sanitario" en una reunión en la que, según él mismo ha relatado, participaron la presidenta Isabel Díaz Ayuso; el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero; el de Hacienda, Javier Lasquetty; y el jefe de gabinete de la presidenta, Miguel Ángel Rodríguez.

Para la Fiscalía, esta revelación podría situarlo como posible investigado y, por tanto, incompatible con su declaración como testigo. Cabe recordar que Burgueño ya está imputado en otro procedimiento vinculado a estos mismos protocolos.

La periodista Beatriz Parera considera que la clave de este segundo procedimiento —al igual que del primero— está en "el cambio en el tipo de delito investigado". Según explica, tanto la Fiscalía como las victimas han centrado ahora sus esfuerzos en demostrar un delito de trato discriminatorio en el a la atención sanitaria, lo que, en su opinión, ha permitido encajar jurídicamente muchas de las conductas que ahora examina la jueza instructora.

"Desde luego —añade Parera—, si Burgueño fue realmente ese 'mando único', eso lo sitúa claramente en el papel de imputado, no en el de testigo".